¿Conoces los beneficios del suelo porcelánico con efecto madera o parqué cerámico para tu hogar o negocio comparado con el tradicional suelo de parqué o laminado de madera?
Resistente al agua
El pavimento porcelánico tiene un coeficiente de absorción de agua prácticamente nulo (máximo 0.5% conforme a ISO 10545 para su definición, aunque en la realidad sea aún más bajo).
Esto significa que la “madera cerámica” se puede utilizar en cualquier estancia con volúmenes altos de humedad y/o agua: baños, cocinas, terrazas y jardines. No tendrás ningún problema si tu suelo se moja accidentalmente: si olvidas cerrar la ventana el día que empieza la gota fría, si se estropea la lavadora o si algún pequeño de la casa decide realizar experimentos…
Resistente al desgaste y arañazos
La madera suele ser por lo general un material más bien delicado que se estropea fácilmente en zonas de alto tráfico de personas, con el movimiento de mobiliario o la caída de objetos. El revestimiento porcelánico es uno de los materiales más resistentes con respecto al desgaste y los arañazos de todos los materiales utilizados para suelos.
Este aspecto es altamente relevante porque hace posible conseguir obtener un suelo con efecto de acabado en madera que se puede utilizar en zonas públicas o comerciales con un alto tráfico de personas que de otro modo quedaría dañado en muy poco tiempo.
Resistente a las manchas y fácil de limpiar
El suelo porcelánico es un material vitrificado con poca porosidad y, por lo tanto, resistente prácticamente a cualquier ataque químico: manchas de productos de limpieza, aceites u otros. Cualquier mancha que veamos será superficial y seremos capaces de limpiarla incluso después de seca. Por esto se puede utilizar el suelo imitación madera en la cocina e incluso detrás de la encimera ya que las manchas desaparecerán con un “esponjazo” rápido.
En el caso de que nos hayan dejado el suelo sucio después de la puesta en obra, es muy fácil de limpiar con el producto que os explicamos en este post. Las manchas de pintura, cemento u otros desaparecerán sin esfuerzo y también se puede utilizar cuando necesitamos desinfectar a fondo, como puede ser un gabinete médico.
Higiénico
El parqué cerámico y los suelos cerámicos son materiales higiénicos que no favorecen el crecimiento de bacterias u hongos. El material es impermeable, aislante, fácil de limpiar y desinfectar, no absorbe líquidos y es no perecedero, con lo cual podemos instalarlo en establecimientos como restaurantes, escuelas infantiles, gabinetes estéticos y demás.
Resistente a rayos UV y heladas
El parquet cerámico es totalmente resistente a los rayos UV y las heladas por lo que se puede utilizar de forma segura en el exterior. Si lo vamos a utilizar en exteriores, asegúrate de elegir la clase apropiada antideslizante para evitar caídas cuando el pavimento está mojado. A pesar de lo fuerte que puede resultar el sol en zonas del mediterráneo, no conseguirá mermar la calidad cromática de tu cerámico lo más mínimo. ¡Genial!
Resistente al calor y quemaduras
Con la “madera cerámica” no deberás tener miedo a que se oscurezca al entrar en contacto con calor de cigarrillos, chimeneas, etc. Asimismo, este material no libera gases o sustancias tóxicas al entrar en contacto con fuego.
Suelo ideal para calefacción por suelo radiante
Si estás pensando en instalar suelo radiante, el suelo cerámico es el mejor material para acompañarlo. Su valor de conductividad térmica permite un rendimiento óptimo del sistema muy superior a la combinación con otros materiales que por sus condiciones de características aislantes crearán una barrera al paso del calor resultando en coste adicional y poco ecológico.
Prácticamente inmutable
El parquet cerámico al igual que cualquier otro revestimiento porcelánico mantendrá sus características por muchos años, no se oscurece ni aclara, no pierde color ni definición, no necesita más mantenimiento que el de la limpieza habitual.
No necesita tratamientos
La madera cerámica no va a necesitar barnices ni pulidos, ceras o aceites. No necesita ningún tipo de tratamiento.
Esto nos garantiza ausencia total de vapores y otros componentes químicos volátiles que pueden aparecer con los acabados de las maderas naturales.
Durabilidad
El suelo porcelánico es un material extremadamente resistente que a pesar del paso del tiempo no sufre ningún tipo de deterioro (siempre y cuando su colocación y características vayan acordes con el uso al que se le destine). Suele ser más habitual el cambio del azulejo por cuestiones estéticas que funcionales.
Apariencia estética final controlada
Cuando utilizamos maderas naturales para un proyecto, hemos de tener en cuenta que cada árbol es único y por lo tanto así lo será también nuestro parquet. Con el parquet cerámico evitamos sorpresas de última hora y conseguimos un control absoluto del acabado estético final que tampoco variará dependiendo del barnizado que se elija para su mantenimiento. Este aspecto puede ser crucial para diseñadores de interiores que buscan un tono cromático muy específico. Además, con las tecnologías utilizadas hoy en día, la madera cerámica tiene casi tanta variabilidad a ofrecer como la madera natural con la ventaja de mantener los tonos cromáticos en el mismo rango.
Posibilidad de reproducir maderas exóticas y exclusivas
La madera de especies exóticas suele ser muy cotizada y en ocasiones se ha incluso retirado del mercado. Estos acabados en maderas naturales pueden volverse escasos y se venden a precios prohibitivos, algo que no ocurre con el pavimento cerámico que además resultará tan fácil de mantener.
